Tras cuatro años de huir de las autoridades policiales y militares, José Antonio Tovar Colina, alias “El Picure”, el delincuente más buscado en el país y quien se jactaba de ser el líder de una banda dedicada a todo tipo de delitos, principalmente al secuestro y la extorsión, murió no sin antes enfrentarse a las autoridades con armas largas y granadas. Junto a él fallecieron cuatro integrantes de su banda, una mínima parte de los 80 miembros que se dice tiene esa megaestreuctura que ha mantenido en jaque al centro del país.

La prensa y las redes sociales dieron cuenta del operativo que duró dos días y en el cual murieron en total nueve personas, entre delincuentes, funcionarios y otras que no tenían nada que ver con el asunto. De Tovar Colina dijo el criminalista Fermín Mármol García a The Associated Press que era “el jefe de la megabanda criminal más importante de Venezuela”, señalada por imponer en Guárico “zonas de exclusividad” donde el grupo se convirtió en la autoridad. Al delincuente caído ayer se le atribuyen directa e indirectamente más de 57 asesinatos.

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