Notimex
Caracas.- El gobierno politizó el problema de la violencia en Venezuela, al polarizar y dividir a la sociedad en bloques casi irreconciliables, afirmó hoy el sociólogo y activista de los derechos humanos, Roberto Briceño León.
“Esta fragmentación de la sociedad originó la más gigantesca ola de violencia e impunidad antes nunca vista en Venezuela”, precisó el coordinador del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV) en diálogo con Notimex.
Briceño León destacó que este quiebre normativo dividió en estancos a la sociedad venezolana, y la ley, los tribunales y los jueces comenzaron a ponerse de un lado y del otro, esto es decir a “partidizarse”, lo que trajo consigo la destrucción institucional.
“Hemos tenido unos años en los cuales el discurso violento, el elogio a la violencia y los violentos ha sido lo fundamental en la sociedad, lo que ha marcado las pautas políticas”, agregó el también director del Laboratorio de Ciencias Sociales (LACSO).
“En Venezuela ocurren 79 muertes por cada 100 mil habitantes, una cifra superior a la de 39 muertes que estima el gobierno, ello es alarmante porque el estándar internacional dice que dicha tasa no debe superar los nueve homicidios por cada 100 mil habitantes”.
El experto indicó que si en 2013 hubo 24 mil 700 homicidios, los primeros dos meses de 2014 se inician con un incremento, con relación al año anterior, y un mayor ensañamiento en la ejecución de las acciones de los delincuentes.
“En el país la violencia se combina además con una impunidad gigantesca. Para 1998, por cada 100 homicidios que se cometían en el país, hubo 118 detenciones. Desde hace cinco años, por cada 100 homicidios cometidos tenemos de ocho a nueve detenciones”, dijo.
Briceño León resaltó que 92 por ciento de los homicidios queda impune, y eso hace que los delincuentes sientan que no hay ninguna posibilidad de ser capturados, ni castigados, por lo que cada vez hay más jóvenes que se incorporan al mundo delictivo.
“El gobierno no puede hablar de pacificación hasta tanto no tenga un plan efectivo contra el hampa y si no se plantea el desarme de todas las bandas criminales y de los colectivos armados de la revolución que operan en las barriadas caraqueñas”, observó el analista.
Finalmente enfatizó que para pacificar el país se requiere hacer eficiente el sistema de justicia y de castigo, pues de mantenerse los niveles actuales de impunidad y la acción extrajudicial de los policías, se incrementará aún más la violencia.