Caraota Digital
Pedro García Otero

Julio 6, 2020

El estudio del Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV) intenta cuantificar un fenómeno en crecimiento que el régimen político quiere ocultar

En el crecimiento del suicidio en Venezuela, han surgido formas como el “suicidio compasivo”, señala Roberto Briceño León, director del Observatorio Venezolano de la Violencia y del Laboratorio de Ciencias Sociales (Lacso) de la Universidad Central de Venezuela.

Para Roberto Briceño León, en el estudio, que abarcó ocho ciudades del país, hay otra forma de suicidio, incuantificable, que es el “suicidio pasivo”: personas que, sencillamente, se echan a morir, no buscan tratamiento para sus enfermedades.

“Estamos hablando de personas que necesitan, por ejemplo, tratamiento nefrológico, no lo buscan y fallecen. En las estadísticas la causa de muerte es otra, pero esta es también una forma de suicidio”, señala el experto.

Las caras del suicidio en Venezuela

El Observatorio Venezolano de la Violencia, con su estudio El suicidio en Venezuela: crisis humanitaria y violencia autoinfligida. Con énfasis en los estados Mérida y Aragua ha intentado poner cifras a un fenómeno de enorme crecimiento en los últimos años (el del suicidio en Venezuela) pero sin estadísticas oficiales.

A través de colaboradores, el OVV tuvo acceso a data epidemiológica de ocho estados, y el resto del estudio se realizó a través de reportes de prensa, redes sociales y entrevistas.

Las tasas de crecimiento en los períodos 2015-2017 y 2015-2018 encontradas por el OVV son de 132% y 153%, respectivamente.

Color desesperanza

Además, señala el informe, y reiteró Roberto Briceño León en entrevista con Caraota Digital, hay un perfil bastante específico de las personas que atentan contra su vida: son mayormente hombres (la prevalencia del fenómeno es de cuatro por cada suicida mujer), jóvenes menores de 39 añoso de edad superior a los 65.

Entre todos, el factor común es la desesperanzaPara los jóvenes, señala Briceño León, el suicidio es la alternativa a una vida en la que se quedaron sin chances de empleo, o de estudiar, y no quieren o no pueden emigrar.

Para los adultos mayoresel “suicidio compasivo” (suicidarse para no representar una carga a la familia, o por padecer una enfermedad crónica) es la decisión más tomada.

Pero hay, expresa Roberto Briceño León, una forma incuantficable de suicidio en Venezuela: el “suicidio pasivo”, gente que sencillamente, se deja morir. Estos, al no tener ninguna esperanza de atención, ya ni se diga tratamiento o curación.

La situación de desesperanza es tan grave, indica Briceño León, que en los venezolanos que salen del país, aunque estén padeciendo incluso mayor miseria que cuando salieron de Venezuela, no hay prevalencia importante de suicidios.

Ello, señala el experto, porque al salir de Venezuela “hay esperanza de progresar, algo por lo que luchar”, lo que inmediatamente reduce la tasa de suicidios a los niveles previos a 2015, cuando la tasa de suicidios venezolana era prácticamente un tercio de la mundial. Ahora, ambas se han equiparado.

Primero reconocer

Señala Briceño León que el problema del suicidio en Venezuela ha pasado a ser un problema de salud pública, en una típica sociedad latinoamericana en la que el homicidio solía tener mucha más prevalencia como forma de muerte violenta.

Pero agrega que dado que el Estado venezolano ni siquiera tiene cifras para cuantificar el fenómeno, dado que no quiere reconocerlo, es importante abordar este problema desde el ámbito de lo privado.

En ese sentido, señaló Briceño León, es importante prestar la ayuda de la comunicación a la persona que esté avisando que pretende atentar contra su vida, porque quienes van a intentar suicidarse suelen avisar.

Además, concluye este experto que en las actuales circunstancias, no solo el régimen político dominante no hace nada para evitar que la tasa siga aumentando, sino que además, inculca desesperanza, lo cual contribuirá, como también lo hará la pandemia y el encierro que esta ha generado, a seguir engordando el fenómeno del suicidio en Venezuela.

No se pierda la entrevista completa a Roberto Briceño León, director del Laboratorio de Ciencias Sociales de la UCV y del Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV), en Caraota Digital:

Fuente: