Prensa OVV Sucre
39 sucesos violentos y delictivos ocurrieron durante los dos primeros meses de 2022 en el estado Sucre. De acuerdo al monitoreo de prensa realizado por el Observatorio Venezolano de Violencia en Sucre (OVV Sucre), durante este periodo prevalecieron los delitos de homicidio, intento de homicidio y robo.
Febrero fue más violento con 13 hechos registrados en la entidad oriental, mientras que en enero fueron monitoreados 10 casos. En total, ocurrieron 23 sucesos con múltiples delitos y 16 con uno.
La coordinadora del OVV Sucre Carmen Julia Amundarain, indicó que a pesar de que persiste la emergencia humanitaria compleja que padece el país y de la cual no es ajeno el estado, los delitos registrados fueron 14 homicidios intencionales, tres tentativas de homicidio y un robo.
En torno al delito de homicidio intencional, 13 fueron asesinatos, dos fueron agresión grave y un homicidio voluntario.
Se observa en esta revisión, que la información sobre las víctimas de los delitos, 17 fueron del sexo masculino y dos femenino. Las edades de las víctimas varían en dos grandes renglones, 33% entre 20 a 29 años y 67% están entre 35 y 54 años.
En el monitoreo de muertes violentas, el OVV Sucre encontró que cinco víctimas fueron funcionarios pertenecientes a los cuerpos de seguridad del estado, de los cuales tres, pertenecían a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y dos a la Policía Estadal.
Un caso emblemático fue el ocurrido el 25 de enero cuando se registró el homicidio de Cesar Patiño de 26 años, funcionario de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), quien falleció luego de que un grupo armado atacó el puesto donde prestaba servicio en la población de Güiria, municipio Valdez. Patiño falleció tras recibir múltiples disparos.
En torno a la ocurrencia de los delitos registrados durante los dos meses, nueve ocurrieron durante la semana en el día y dos durante la noche. En relación a los decesos acaecidos durante los fines de semana, cuatro ocurrieron en el día y tres en la noche. Ocho de los casos ocurrieron en espacios abiertos o en la calle, siete en el hogar de la víctima, dos en el lugar de trabajo de la víctima y uno en el lugar de estudio.
De acuerdo a la información recogida por el equipo de investigación del OVV Sucre, el arma más utilizada en 13 de los casos fue la de fuego, en cuatro hechos se utilizaron objetos cortantes y en uno se usó la fuerza física.
En el contexto situacional de los delitos de homicidio intencional o agresión, 41% los casos estuvieron relacionados con los delitos de robo, 29% con otra forma de homicidio intencional, 24% dos de los hechos estuvieron relacionados con grupos delictivos organizados y con pareja o familiar, y 6% durante la comisión de otro delito.
En torno a las víctimas de robo, vale mencionar el caso ocurrido el 31 de enero cuando se registró el homicidio del ciudadano Dalmiro Martínez de 26 años, luego de que sujetos armados ingresaran a su casa en Carúpano, presuntamente para robar sus pertenencias y al resistirse, fue herido de gravedad. Los vecinos escucharon varios disparos y la víctima falleció en el trasladado al hospital Santos Aníbal Dominicci del municipio Bermúdez.
Por otro lado, dentro del monitoreo realizado por el OVV Sucre sobre la motivación del hecho delictivo, distinto del homicidio intencional o agresión, se encontró que 44% de los casos fueron ajuste de cuentas, 39% tuvieron otra motivación, 11% estuvieron basado en género y 6% por conflicto interpersonal.
En ese sentido, Amundarain destacó la incidencia de la violencia en el diario acontecer de la población sucrense que cada día se ve más afectada por la crisis económica, política y social que además ha sido agudizada por la pandemia del Covid- 19 y cuyos temores se intensifican con la actuación de la delincuencia común y los grupos armados que se articulan a lo largo del territorio sucrense.
Muertes por Intervención Policial
En el período entre enero y febrero ocurrieron cinco muertes por intervención policial (MIP), registradas en la misma zona de residencia de las víctimas en cuatro de los casos.
Dos de los sucesos, tuvieron participación del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), y en el mismo número de hechos estuvieron involucrados funcionarios del Instituto Autónomo de Policía del estado Sucre (Iapes). Mientras que un caso fueron funcionarios de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB), los que realizaron la intervención.
Las víctimas de MIP fueron del sexo masculino, con edades comprendidas entre los 15 y 29 años en 99% de los casos.
Sobre esta categoría es posible señalar la muerte de Luis Ernesto Valencia Rosal, quien era investigado por el delito de homicidio y falleció en presunto enfrentamiento con la Policía del municipio Bermúdez durante un hecho ocurrido en el sector Macarapana, cuando al parecer los uniformados realizaban labores de investigación.