Prensa OVV Monagas
Al comparar 2023 con el año 2022, cuando Monagas registró una tasa de 34 por cada 100 mil/h, se observa una reducción de 45,59%. A pesar de la reducción de muertes violentas en términos generales, la categoría homicidios legalmente establecidos mostró una tendencia importante en relación a otros estados.
Durante el año 2023 el estado Monagas, registró un descenso importante en las tasas de muertes violentas, estimándose en 18,5 por cada 100 mil habitantes (mil/h); según lo expresado en el informe de violencia regional, elaborado por el Observatorio Venezolano de Violencia en Monagas (OVV Monagas). Las investigadoras del OVV regional, explicaron que en la composición de esta cifra se incluye: homicidios legalmente establecidos (9,2), muertes por intervención policial (1,2), casos de averiguación de muertes (8).
Destacaron las voceras que esta tasa regional de 18,5 por cada 100 mil/h, permite posicionar a la región en el puesto 19 del ranking nacional, con una tasa por debajo de la media nacional, estimada en 26,8 por cada 100 mil/h, es decir 8,3 puntos de diferencia, desplazando a la región al décimo noveno lugar.
Al comparar 2023 con el año 2022, cuando Monagas registró una tasa de 34 por cada 100 mil/h, se observa una reducción de 45,59%. A pesar de la reducción de muertes violentas en términos generales, la categoría homicidios mostró una tendencia importante en relación a otros estados. En el año 2023, se reitera la preeminencia de los homicidios como forma letal del delito, a pesar de presentar una disminución en relación con el año 2022, cuando se registró una tasa de 21 por cada 100 mil/h ubicándose en segundo lugar en el país. Sin embargo, Monagas bajó cuatro peldaños en el ranking nacional y pasó a ocupar el séptimo puesto en relación a este tipo de suceso, superada por el Distrito Capital, Delta Amacuro, Sucre, Guárico, Miranda y Bolívar.
Las investigadoras afirmaron que las muertes por intervención policial no se constituyen en un rasgo destacado de la violencia en el estado Monagas. “Es por esta razón que se observa que la tasa 2023 es de tan solo 1,2 por cada 100 mil/h; principalmente asociada con presuntos enfrentamientos entre cuerpos de seguridad y personas vinculadas con actividades delictivas”.
Agregaron que, en la otra categoría, muertes en averiguación, la tasa nacional es de 15,6 por cada 100 mil/h, en tanto que en Monagas se registró una tasa de 8 por cada 100 mil/h, es decir 80% por debajo de la media nacional, reportándose un total 66 muertes que están aún por determinarse. Destacaron que, “este tipo de muertes están representadas por situaciones en las cuales los cuerpos policiales, bien sea porque no poseen recursos o porque omiten acciones para proseguir las investigaciones o no se culmina la determinación de un grupo importante de ellas, dando paso a la impunidad como efecto que retroalimenta la comisión de los homicidios”.
Enfatizaron que la reducción de las tasas de muertes violentas surge del contexto referencial del estado Monagas. “Este fenómeno puede ser atribuido a tres variables fundamentales: la emigración importante de personas hacia otras naciones, la disminución las oportunidades de los grupos delictivos para la obtención del provecho ilícito y la focalización de acciones reactivas por parte de los cuerpos de seguridad, para disminuir los altos índices de violencia que venía registrando la entidad en años anteriores”, aseguraron.
Es importante mencionar que, en términos absolutos, los municipios que registraron mayor cantidad de muertes violentas, en orden decrecientes, fueron los siguientes: municipio Maturín (63), Libertador (14), Sotillo (14), Ezequiel Zamora (12), Piar (12) y Punceres (12). Este resultado tiene explicaciones con base a los acontecimientos particulares, así como, al patrón de comportamiento delincuencial en la región.
Algunas características del delito en Monagas
En relación a los distintos delitos en el estado, las investigadoras señalaron que, de acuerdo a la revisión de prensa regional, pudo estimarse porcentajes asociados a los delitos con mayor incidencia, entre los cuales estuvieron: homicidio intencional con 39,9%, agresión con lesiones graves un 26,6% y tentativa de homicidios 11,4%. Le siguen en orden decreciente violación sexual 10,1%, robo 8,9% y otras agresiones sexuales 6,3%, secuestro 2,5%, amenaza de muerte y amenaza de agresión 1,3%. Por otra parte, las armas empleadas para cometer delitos fueron, principalmente, la fuerza física 44,3%, seguido armas de fuego en los delitos con 25,3%, objeto cortante o punzante 12,7% y otras 10,1%, destacando que el uso preeminente de la fuerza física puede estar asociado con el aumento de casos de abuso sexuales, violencia doméstica y violencia contra niños, niñas y adolescentes, “hechos que han adquirido visibilidad en la prensa y redes sociales”.
Al detallar el tipo de delitos por sexo, tanto las tentativas (88,90%) como los homicidios (84,60%) tuvieron como víctimas a hombres, recordando que en el período en estudio se conocieron de homicidios de mujeres (15,40%). Por otra parte, las mujeres siguen siendo más vulnerables en situaciones como: violación sexual y otras agresiones sexuales (100%). En este año, el delito de agresión (incluye lesiones graves o leves) 61,90% en mujeres y 38,10% en hombres (ver gráfico 5); en primero de los casos generalmente suceden en contextos de violencia de género y en segundo en situaciones de riñas, ajustes de cuenta o problemas con familiares o conocidos.
El OVV Monagas considera imprescindible fortalecer la institucionalidad democrática para instaurar la vigencia del estado derecho, la protección de los derechos humanos y las vías pacíficas de resolución de conflictos. Urge también la creación de oportunidades educativas y laborales que brinden opciones de vida digna a los jóvenes, para desalentar el reclutamiento por organizaciones delictivas. Políticas activas contra la feminización de la pobreza y a favor de la equidad de género, fueron otras de las recomendaciones realizadas por las investigadoras.