El asesinato de la ex-Miss Venezuela y actriz Mónica Spear y de su marido a manos de delincuentes armados ha conmocionado a la sociedad venezolana y motivado al Gobierno a abordar con urgencia el problema de la violencia en el país.
La sociedad venezolana respondió al asesinato de la Miss Venezuela 2004 y de su marido en un ataque armado en el que resultó herida su hija de cinco años, con manifestaciones multitudinarias cuya reivindicación principal fue poner coto a la violencia en el país.
El presidente Maduro convocó con urgencia una reunión del Gobierno con los gobernadores de los veintitrés estados venezolanos, más los alcaldes de setenta y nueve municipios del país con mayor índice de delincuencia. El mandatario venezolano les invitó para tratar el problema de la inseguridad que de nuevo se planteó con agudeza tras la consternación social tras el asesinato de la popular modelo y actriz Mónica Spear.
Además, la cita constituyó el primer encuentro entre el presidente Maduro y el líder de la oposición, Henrique Capriles, gobernador del estado de Miranda y su rival en los comicios presidenciales de abril del año pasado. Todos los medios que informaron de esa reunión en el palacio de Miraflores destacaron que a su llegada a la cita, Maduro estrechó la mano de varios de los gobernadores presentes, entre ellos Capriles. El apretón de manos fue breve, pero simbólico.
Al dirigirse a los reunidos, Maduro dijo que pretende desarrollar un nuevo modelo para atajar la violencia “vinculada a la droga, a los antivalores de la riqueza fácil, del desprecio a la vida”:
–Cuando accionaron esas armas de manera vil, criminal, con saña, con ventaja: ¿Qué los movía? Preguntémonos: ¿Qué mueve al ser humano a tomar un arma y acabar con la vida de otro compatriota? Bueno, podríamos decir “casi gratuitamente”, porque estos casos fueron masacrados sin mediar robo ni ninguna otra intención.
Es el caso de esta actriz joven venezolana. Es el caso de estos jóvenes venezolanos guardias del pueblo que fueron masacrados la última semana de diciembre.
No midió nada, solamente la masacre, la matanza. Son matanzas. Y nosotros tenemos que preguntarnos: ¿Cómo hacemos para parar la matanza en Venezuela? ¿Qué podemos hacer que no hayamos hecho todavía?. Porque algo no hemos hecho para que eso suceda.
Así sea verdad que han bajado los índices aquí y allá y más allá… Son los índices de la muerte….Está bien, pero en todo caso son homicidios, son asesinatos. Estamos como en una “ruleta de la muerte”.
¿Cuáles son las causas fundamentales de eso? ¡Busquémoslas! Por eso es que se debate entre guerra alampa o ni con el pétalo de una rosa un debate falso. Entonces, tenemos que combinar una política integral de todo el Estado venezolano, de toda la sociedad venezolana que nos permita verdaderamente combinar factores y garantizar la ocupación del territorio y la protección de la sociedad en su conjunto.
En esa reunión en la sede del Gobierno habló sólo Maduro para proponer el comienzo de un trabajo que “en un mes tenga resultados concretos en la práctica y en la formulación de una política” sobre el tema.
“He propuesto, y yo se lo propongo a ustedes, para que me ayuden a hacerlo (…), un Plan de Pacificación general en el año 2014 en todo el territorio de la patria”, indicó el mandatario ante los asistentes a la reunión, incluidos los gobernadores y alcaldes opositores al Gobierno.
El mandatario venezolano llamó a mancomunar los esfuerzos para “ir a un proceso de pacificación y desarme global” del país, considerado uno de los más inseguros de Latinoamérica.
Según el Gobierno, Venezuela cerró el 2013 con una tasa de homicidios de treinta y nueve por cada cien mil habitantes, pero organizaciones no gubernamentales, como el Observatorio Venezolano de Violencia, hablan de una media de muertes violentas de setenta y nueve por cada cien mil habitantes.
La Fiscalía venezolana informó de la detención de siete personas —cuatro hombres, una mujer y dos adolescentes—, por su presunta vinculación con el asesinato de Mónica Spear, de veintinueve años, y la de su pareja, Thomas Henry Berry, de treinta y nueve años, registrado el pasado lunes en la autopista de Puerto Cabello a Valencia, la parte central de Venezuela.
Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.