Prensa OVV Lara
Los delitos representaron 34% de los hechos registrados en la entidad, según los datos del Observatorio de Prensa (OP) del OVV Lara. Los municipios con mayor incidencia de robos y hurtos durante 2024 fueron: Palavecino, Crespo, Torres, Jiménez e Iribarren.
La dinámica delincuencial en el estado Lara durante el 2024 estuvo caracterizada por los robos y los hurtos, los cuales representaron 34% de los hechos registrados en la entidad, según los datos del Observatorio de Prensa (OP) del OVV Lara. Estos delitos continúan siendo los más frecuentes en la región, consecuencia de la presencia permanente de las causas estructurales de la violencia que siguen ancladas en Venezuela.
Los municipios con mayor incidencia de robos y hurtos durante 2024 fueron: Palavecino, Crespo, Torres, Jiménez e Iribarren, en este último las parroquias donde hubo más denuncias fueron: Unión, Ana Soto, Santa Rosa, Tamaca y Concepción.
En Venezuela y en el estado Lara no se conocen cifras oficiales sobre los distintos tipos de delitos cometidos en país, no obstante, el hurto y el robo siguen siendo los hechos que más se reseñan en los medios de comunicación de la región. El hurto agravado de bienes e inmuebles, mantiene una alta incidencia desde 2016, ya no solo en los sectores medios sino en los sectores populares, en los que se comenzó a evidenciar la extracción ilegal de bombonas, tanques de agua, herramientas de trabajo doméstico y otros bienes, producto de la escases y el empobrecimiento estructural de la sociedad venezolana.
Hurtos de moto y vehículos
En el mes de diciembre de 2024, se registraron más de 20 denuncias de robos y hurtos de motocicletas en el municipio Iribarren. Las victimas realizaron una protesta para indicar la gravedad de la situación de la ola delictiva que los afecta, solicitando a las autoridades implementar estrategias efectivas que garanticen la seguridad.
Asimismo, en los estacionamientos de los centros comerciales y supermercados de Barquisimeto, hubo robos de vehículos y objetos de valor. Según las reseñas de prensa, los delincuentes sometieron a las víctimas con armas de fuego y los amenazaban de muerte, para despojarlos de sus pertenencias.
Para el equipo de investigadores del OVV Lara, la percepción de inseguridad en la ciudadanía persiste debido a la falta de confianza en las instituciones encargadas de garantizar su protección. Esta situación se ve agravada por factores como el desempleo y la carencia de ingresos, que conducen a algunos individuos a involucrarse en actividades delictivas. Este contexto alimenta un ciclo de violencia, lo que requiere una atención urgente por parte de los organismos competentes para restaurar la seguridad y la confianza pública.