Prensa OVV Trujillo
Al igual que en el año 2020, el primer semestre del 2021 transcurrió con el acatamiento de la cuarentena social decretada por el gobierno nacional, donde persiste la restricción sobre el libre tránsito a través de la implementación de semanas “flexibles y radicales”. No obstante, estos controles de movilidad social no limitaron la acción delictiva de los grupos criminales que continuaron cometiendo delitos en territorio trujillano.
En el estado Trujillo, durante los primeros seis meses del año 2021 -de enero a junio-, ocurrieron 60 sucesos violentos con un total de 40 víctimas fatales, de las cuales el 52,5% fueron producto de la violencia policial y el 47,5%, de la violencia delincuencial.
Estos datos se desprenden del monitoreo de prensa regional del Observatorio Venezolano de Violencia en Trujillo (OVV Trujillo), dados a conocer en su Informe Semestral Regional presentado a los medios de comunicación.
Johny Humbría, coordinador del OVV Trujillo, expresó que durante este primer semestre del año 2021 la violencia delincuencial diversificó su manera de accionar. Se refirió al ingreso a las viviendas de las víctimas y el asesinato de supuestos informantes, con la finalidad de amedrentar a las comunidades por haber denunciado a los grupos delictivos ante las autoridades.
Según las cifras obtenidas, se registraron un total de 44 delitos de violencia interpersonal, entre los cuales se encuentran homicidio intencional (19), tentativa de homicidio (1), secuestro (3), violación sexual (2), robo (2), agresiones (7), coacción (7) y amenaza de agresión (3).
El homicidio intencional fue el delito más grave registrado en la entidad durante este periodo; entre estos casos se contabilizaron asesinatos (68%), feminicidios (11%), infanticidios (16%) y sicariato (5%).
La mayoría de las víctimas, de los delitos que se obtuvo información, fueron atacadas con armas de fuego (43%), objetos cortantes o punzantes (30%) y fuerza física (23%). En relación al sexo, 66% de los casos corresponden al sexo masculino y 34% al femenino.
En la revisión sobre el móvil de los sucesos, las estadísticas de los delitos de violencia interpersonal indican que el 43% fue por provecho ilícito, 20% basado en género, 20% ajuste de cuentas, 3% en riñas y 3% por venganza.
La violencia policial en Trujillo
Siguiendo la tendencia del 2020, la letalidad policial generó mayor número de muertes que la delincuencial en la entidad. Según la revisión de prensa, en 16 procedimientos policiales perdieron la vida 21 personas.
Del total de los hechos registrados sobre este tipo de violencia, 17% fueron ejecutados por las Fuerzas Armadas Policiales del estado Trujillo (FAPET); 5% por el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC); 3% por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y 2% en operativos en conjunto.
Los meses con mayor número de casos por muertes por intervención policial fueron febrero (25%), marzo (19%) y junio (25%).
Los municipios donde ocurrieron dichas muertes fueron Andrés Bello, Boconó, Candelaria, La Ceiba, Miranda, Monte Carmelo, Motatán, Pampán, Sucre y Valera.
Violencia de género en alza
La violencia de género marcó una tendencia al alza con relación al año 2020. Según el informe del OVV Trujillo, este aumento coincide con la cuarentena social, lo cual ha cambiado la cotidianidad de las familias y puede estar incidiendo en el aumento de este tipo de violencia.
En los municipios Andrés Bello, Boconó, San Rafael de Carvajal, Pampán, Pampanito y Valera se registraron casos de violencia basada en género (feminicidios, violencia física y psicológica).
Municipios más violentos
De acuerdo al monitoreo de prensa de los seis primeros meses del año 2021, el municipio donde hubo el mayor número de delitos fue Valera, seguido por Boconó, Andrés Bello y La Ceiba. Luego aparece un segundo lote de municipios con un alto porcentaje de delitos, entre los que destacan Miranda, Pampán y San Rafael de Carvajal.
Para el equipo del OVV Trujillo, uno de los aspectos más relevantes fue el cambio de patrón detectado en el municipio Boconó, el cual pasó de no registrar hechos notables de violencia, a ocupar, en esta ocasión, el segundo lugar con el mayor número de delitos en la entidad trujillana.
Le siguen los municipios Andrés Bello y La Ceiba, los cuales presentan los niveles de pobreza más elevados del estado Trujillo, de acuerdo con los datos publicados por el Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la Universidad Católica Andrés Bello, a través de los indicadores sociales de la Encuesta de Condiciones de Vida (ENCOVI). Ambos tienen niveles de pobreza de un 99%, alcanzando una pobreza extrema de 63% y 69%, respectivamente.
Humbría maneja entre sus hipótesis que dichos niveles de pobreza podrían estar motivados al control territorial que ostentan los grupos de delincuencia organizada, los cuales siguen limitando en esos municipios las actividades productivas y el libre tránsito territorial.
En términos generales, se mantiene la tendencia del año 2020, donde los municipios pertenecientes al eje panamericano encabezan los niveles de violencia en el estado Trujillo; siendo el provecho ilícito el que representa el mayor porcentaje de motivación de los hechos delictivos en la entidad trujillana, seguido por el ajuste de cuentas.
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