Prensa OVV Carabobo

El secuestro es uno de los delitos que pocas veces es denunciado por las víctimas y sus familiares ante las autoridades policiales en la entidad carabobeña, bien sea porque temen que la persona secuestrada sea asesinada o porque acceden al pago de grandes sumas de dinero a los captores. Estos individuos son, por lo general, miembros de bandas organizadas que buscan acumular capital, controlar la zona donde operan y llevar a cabo otras actividades ilícitas.

A través del monitoreo de prensa del mes de noviembre, el Observatorio Venezolano de Violencia en Carabobo (OVV Carabobo) registró el secuestro de un comerciante de origen lusitano en la población de Morón del municipio costero Juan José Mora. La víctima fue sometida frente a su negocio por unos hombres que utilizaban vestimenta de un cuerpo policial y quienes lo mantuvieron por 14 días en cautiverio hasta que sus familiares pagaron por su liberación.

Igualmente, durante un operativo realizado en noviembre por el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) fue rescatado un ciudadano, de 78 años, a quien habían secuestrado en el mes de octubre en el sector La Floresta de la zona industrial en el municipio Guacara.

En octubre también se registró el caso de un comerciante que fue secuestrado en el sector los Chaguaramos I de la parroquia Central Tacarigua del municipio Carlos Arvelo, según las versiones preliminares, por miembros de una banda delincuencial que opera en la zona. El ciudadano fue rescatado sano y salvo por funcionarios del CICPC y del Comando Antiextorsión y Secuestro de la Guardia Nacional Bolivariana durante un procedimiento en el que murieron tres de los secuestradores, quienes enfrentaron con armas de fuego a los efectivos.

Los cuerpos de seguridad no suministran datos estadísticos sobre los secuestros que acontecen en la entidad, lo que imposibilita conocer la incidencia en la región más allá de los casos publicados. Sin embargo, se han reportado en los medios de manera frecuente enfrentamientos entre funcionarios de los cuerpos de seguridad e integrantes de bandas delincuenciales identificadas por las autoridades como grupos delictivos dedicados al secuestro, entre otros delitos. “Esto indica que debe haber una alta ocurrencia de secuestros y también desinformación de la realidad al respecto, lo que es muy grave porque a las víctimas en cautiverio se les vulnera el derecho a la libertad individual, se amenaza la integridad personal y la vida misma”, detalló la coordinadora del OVV Carabobo, Giannina Fusco.

La investigadora reiteró que las autoridades deben garantizar la seguridad de todos los ciudadanos, además de diseñar y aplicar medidas de protección para combatir la violencia en todas sus expresiones.