Prensa OVV Zulia
Durante este primer cuatrimestre de 2023, se han contabilizado 13 casos de extorsiones, de los cuales el mayor número se produjo en el mes de marzo (38,5%), seguido del mes de febrero (30,8%), enero (23,1%) y abril (7,7%) respectivamente.
Apenas eran las 8:30 de la mañana, del sábado 18 de febrero, cuando la ciudad de Maracaibo se conmovió frente a la terrible noticia de que delincuentes habían atacado a una carnicería, ubicada en la calle 98 de la parroquia Cecilio Acosta. El saldo del suceso fueron tres personas heridas de bala, una de ellas de gravedad. Escenas de terror se vivieron en ese comenzar de la actividad comercial en la ciudad. Pero sólo habían transcurrido dos horas y media, cuando a las 11 de la mañana, otro establecimiento comercial, ahora situado en la calle 78 Dr. Portillo, con avenida 15 Delicias, en predios de la parroquia Olegario Villalobos, los delincuentes también se hicieron presentes con sus armas de fuego. Antes había arrojado al suelo un artefacto explosivo, mientras uno de ellos disparaba a mansalva a los presentes dejando cuatro heridos.
En ambos casos se tiene claro que el móvil fue la coacción, el cobro de “vacuna”, la extorsión, la cual ha presentado este año 2023 un rostro más violento y dirigido a causar lesiones y pérdidas de vidas humanas, sumadas a las materiales. Estos dos eventos dejaron como saldo fatal dos personas fallecidas (una en cada negocio) y a sus familias sumidas en el dolor, ante la partida inesperada de sus seres queridos, de manos de la delincuencia.
Sin embargo, es necesario señalar que en 2023, estos sucesos violentos motivados por la extorsión en el Zulia, iniciaron el cinco de enero, despuntando el nuevo año. A través de los medios de comunicación, ese día los zulianos obtuvieron la información sobre la colocación de un artefacto explosivo en un local comercial. Este evento fue catalogado como el primer suceso de extorsión en 2023 utilizando explosivos contra comerciantes y empresarios. En este mismo mes, en las aguas del Lago de Maracaibo aconteció el ataque de bandas extorsivas contra tres pescadores que fueron asesinados, víctimas de estos actos. Por las redes sociales circularon mensajes presuntamente de los grupos de delincuencia organizada (GEDO) que se adjudicaban la autoría de esos crímenes y amenazando con nuevas arremetidas sino pagaban la “vacuna”.
El 16 de marzo, en una empresa de hielo se produjo un tiroteo que dejó como resultado un hombre muerto, en La Villa del Rosario. Este mismo mes, el día 20, una pareja fue asesinada en el municipio San Francisco, con el agravante que la mujer estaba embarazada. Con toda seguridad estos eventos fueron protagonizados por extorsionadores.
Sobre estos sucesos, el coordinador del Observatorio Venezolano de Violencia en el Zulia, Jorge Govea Cabrera, señaló que causa mucha preocupación el hecho de que las extorsiones en el estado Zulia también han trasladado las agresiones a los hogares de los comerciantes. Esto quedó evidenciado en el suceso ocurrido el 20 de marzo en La Villa del Rosario, cuando los delincuentes se presentaron en el hogar del comerciante y procedieron a disparar contra su vivienda. No hubo víctimas, únicamente daños materiales. El 6 de abril se presentó un atentado contra una farmacia también en La Villa del Rosario. En este hecho murieron dos delincuentes, otro está prófugo y resultó detenida una mujer por su presunta participación en el incendio que estos hombres intentaron provocar en ese establecimiento.
La extorsión en cifras
Este panorama de violencia, según Govea Cabrera viene presentándose con fuerza desde los años 2021-2022 en el estado Zulia. En este primer cuatrimestre de 2023, se han contabilizado ya 13 casos. El mayor número se produjo en el mes de marzo (38,5%), seguido del mes de febrero (30,8%), enero (23,1%) y abril (7,7%) respectivamente. De los 13 casos, 11 fueron consumados, los demás casos fueron para intimidar a las víctimas.
Los municipios donde hubo más presencia de este delito fueron:
Puede notarse que el municipio Maracaibo ocupó el primer lugar, seguido de Rosario de Perijá, San Francisco y Colón.
En cuanto a las víctimas, prevalecieron las del sexo masculino (85,7%), mientras que el sexo femenino alcanzó un menor porcentaje, tal y como puede observarse en la tabla siguiente:
Las edades de las víctimas estuvieron ubicadas entre 18 a 54 años. Aunque hay dos casos en los cuales esta información no fue proporcionada por el medio de comunicación local.
Según el representante regional del OVV, el delito se llevó a cabo, especialmente, los días de semana en horas del día y en la madrugada.
Las personas que cometieron estos actos de violencia pertenecían a la delincuencia común, aunque el contexto situacional y de actuación obedeció a los Grupos Organizados de Delincuencia Organizada (GEDO), no a simples pandillas. En cuanto a la motivación de ese delito 100% se concentró en provecho ilícito derivado de la actividad extorsiva, como se ha de suponer.
En cuanto al tipo de armas utilizadas prevalecieron las de fuego, seguidas de los explosivos.
Sin planes ni políticas
Frente a la pregunta sobre las acciones tomadas para frenar las extorsiones, el coordinador de OVV Zulia señaló que lamentablemente lo acontecido en esta materia en el año 2021, 2022 y en el primer cuatrimestre de 2023 ha puesto en evidencia que no se están implementando, desde el gobierno nacional, medidas de tipo preventivas sino que los cuerpos de seguridad del Estado responden una vez que se han producido los eventos violentos”. “Esto implica un riesgo latente y continuo, que le roba la confianza a los zulianos y les impide movilizarse con tranquilidad y seguridad por sus espacios rutinarios e incluso por todo el estado, especialmente aquellos donde la extorsión ha dejado víctimas fatales”, señaló Govea.
Sentir zuliano
Señaló Govea Cabrera, que recientemente su equipo de investigación, preguntó aleatoriamente a algunas personas que se encontraban en un centro médico de salud privado de Maracaibo sobre el clima de seguridad que experimentaban al estar en un lugar que ha sido escenario de violencia motivada por la extorsión. De 30 personas consultadas, todas manifestaron experimentar miedo al estar ubicados en las salas de espera cercanas a la salida de este establecimiento, pues temen ser sorprendidas por algún acto de violencia que atente contra sus vidas y las de sus familiares. Los agentes de seguridad ubicados en sitios estratégicos de esta clínica les ofrecen un poco de tranquilidad, pero revelaron los participantes de estas rápidas entrevistas que no logran estar relajados. Agregaron que no se sienten protegidos en ningún espacio y muchos menos en aquellos cuyo perfil los hace potenciales víctimas de la extorsión y sus peligrosas consecuencias.
Las recientes declaraciones a la prensa del coordinador del OVV Zulia en torno a este tema se resumen resaltó que queda mucho por hacer. “Para el control de esta situación se hace necesario compromiso, recursos y acciones decididas de los organismos gubernamentales y de seguridad para lograr frenar esta ola de violencia que han creado los GEDO en nuestro estado; que en este primer cuatrimestre del año ha alcanzado 13 casos, superando los años 2021-2022” señaló.
Concluyó Govea diciendo que resulta alarmante la situación, por lo tanto se debe hacer algo para que la población zuliana retorne a la confianza, en la medida que se sienta protegida.