Prensa OVV Guárico

Comer 3 veces al día resulta complicado para el personal de enfermería en el estado Guárico, considerando que el sueldo aproximado de estos profesionales se ubica en 3,5 dólares mensuales, ingreso que escasamente les permite adquirir 3 artículos de la cesta básica.

Petra Malavé, presidenta del Colegio de Enfermería en la entidad, destacó que el personal que trabaja en la red hospitalaria pública no recibe alimento alguno durante las guardias que en ocasiones se extienden hasta por 24 horas, limitándose la ingesta mayoritariamente a una sola comida, consistente en lo poco que pueden preparar en sus casas.

También señaló que la ausencia de respuesta a las insistentes y justas reivindicaciones salariales del gremio ha conducido a más de 400 enfermeras y enfermeros llaneros a dejar sus cargos en el sector salud; algunos optaron por emigrar y muchos de los que aún permanecen en el país se han visto obligados a dedicarse a otras actividades como estrategia de sobrevivencia en medio de la compleja crisis venezolana.

Asimismo, manifestó su preocupación por los efectos negativos que la deserción masiva de profesionales del gremio está ejerciendo en la prestación de los servicios médico-asistenciales en los centros de salud públicos, ocasionando un déficit que está causando excesiva fatiga al personal que aún labora en la red pública, el cual ha visto elevarse desmedidamente el número de pacientes que debe atender en guardias agotadoras.

La gremialista se refirió también a la acentuada disminución del ingreso de estudiantes en las diversas instituciones de educación superior que imparten programas de licenciatura en enfermería, comprometiendo seriamente la formación de las generaciones de relevo, y estima que de mantenerse esta tendencia no quedarán profesionales de la enfermería laborando en el ámbito público en el país.

Al incorporar al análisis el efecto de la pandemia, se tiene que el primer caso de Covid-19 en Guárico se informó el 25 de marzo de 2020, 13 días después de la confirmación gubernamental de la aparición del virus en el territorio nacional. Desde entonces, la presión sobre una red de salud con acentuadas carencias de insumos, de material de bioseguridad, de equipos esenciales, de medicamentos e infraestructuras deterioradas constituye el escenario que tiene que confrontar el personal que labora en la maltrecha red de salud pública guariqueña.

El reciente desplome del ascensor del hospital Rafael Zamora Arévalo de Valle de La Pascua, municipio Infante, visibilizó la magnitud del deterioro de la infraestructura hospitalaria. Afortunadamente, la adolescente que estaba siendo trasladada luego de superar una intervención quirúrgica, y que se encontraba en el interior de la cabina al momento del accidente, resultó ilesa.

La deficiente infraestructura eléctrica, responsable de continuas fallas en el suministro de energía, la escasez generalizada de gasolina y la intermitencia en el suministro de agua corriente dificultan la adopción de las medidas de higiene esenciales para la contención del Covid-19, que sumado a los obstáculos impuestos al ingreso de apoyo humanitario internacional y la ausencia de transparencia en la contabilización y emisión de datos epidemiológicos, terminan de configurar la crisis epidemiológica venezolana. 

Al contrastar las estadísticas oficiales con las ofrecidas por la Organización Médicos Unidos de Venezuela (MUV), capítulo Guárico, emerge el subregistro de los datos epidemiológicos correspondientes a Covid-19, práctica que pudiera estar generando zozobra en la población, pues basta contabilizar el número de conocidos contaminados y/o fallecidos para refutar la veracidad de las estadísticas oficiales.

El último reporte gubernamental dando cuenta de los casos acumulados en la entidad desde el inicio de la pandemia corresponde al 24 de abril del año en curso; en él se reportaron 118 casos activos, en 11 de los 15 municipios, con 1.278 personas recuperadas y 23 decesos, que arroja un total de 1.419 casos desde el inicio de la pandemia en marzo de 2020.

En tanto que los registros a la misma fecha de MUV Guárico indicaban que el número de profesionales vinculados al sector salud fallecidos en la entidad como consecuencia de síntomas de Covid-19 alcanzaba 20 individuos.

Desde el Observatorio Venezolano de Violencia sede Guárico (OVV Guárico) nos sumamos al reconocimiento que merece el personal sanitario que, movido por su admirable vocación, continúa ejerciendo en medio de una precariedad caracterizada por exiguas remuneraciones, escasez de medicamentos y de material de bioseguridad, falta de equipos médicos, infraestructura deteriorada y fallas persistentes en el suministro de agua que configuran un escenario de altísimo riesgo exaltado por la pandemia del Covid-19.