Prensa OVV Región Capital

Con al menos 1.148 fallecidos por la violencia y una tasa de 89,2 muertes violentas (MV) por cada 100 mil habitantes, el Distrito Capital se ubicó, por segundo año consecutivo, como la entidad federal con la tasa de violencia más alta del país, según las estimaciones del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV) presentadas como parte de su Informe Anual 2022.

Esta tasa ratifica a Caracas como la ciudad más violenta del país, y representa un incremento respecto al año 2021, cuando Distrito Capital registró una tasa de 77,9 MV por cada 100 mil habitantes. A su vez, la tasa de 2022 está muy por encima de la tasa nacional estimada por el OVV, que fue de 40,4 MV por cada 100 mil habitantes.

La preponderancia del Distrito Capital se observa en la lista de las cinco entidades con mayor violencia en el país, la completan La Guaira, Miranda, Bolívar y Carabobo. Estas unidades geográficas, por las magnitudes de sus cifras, son consideradas extremas de acuerdo con las estimaciones del OVV.

La cuantía de los fallecidos y las tasas son el resultado de cuatro categorías que componen fundamentalmente la violencia en Venezuela. Para 2022, el OVV estima que en Distrito Capital hubo 217 homicidios a manos de la delincuencia, para una tasa de 13,0 MV por cada 100 mil habitantes; las muertes por intervención policial (MIP) fueron 81, cuya tasa fue de 5,0 MV por cada 100 mil habitantes; 850 muertes en averiguación, con una tasa de 50 MV por cada 100 mil habitantes; y 370 desapariciones, cuya tasa fue de 22 MV por cada 100 mil habitantes.

En su Informe Anual, el OVV también dio a conocer que en la capital del país hubo al menos 1.440 víctimas de lesiones y 24 de violaciones, las cifras son más altas que en las demás entidades federales. Adicionalmente, se contabilizaron dos (2) casos de secuestros y, 129 suicidios, cifra que comienza a tener una frecuencia mayor respecto a los años anteriores.

Las muertes por averiguación y desapariciones representaron los componentes con más peso en los números de violencia. Las averiguaciones de muerte, en opinión de este Observatorio Regional, se tratan de homicidios que permanecen sin aclarar; mientras que los casos de desapariciones son muertes de las cuales no se tiene conocimiento del destino de la víctima. Las cifras para ambos componentes se consideran extremas, y aumentaron más del doble con respecto a lo registrado en 2021.

El OVV Región Capital conjetura que hay varios factores que ocasionaron estas magnitudes de la violencia en 2022, siendo los dos principales: el accionar de los delincuentes a través de grupos criminales organizados, que mantienen un importante control territorial en sectores de la ciudad; y la disminución en los operativos policiales, que aún siguen activos y no se observaron con la misma intensidad que en años anteriores.

Asimismo, se notó un cambio en los patrones de violencia interpersonal, con la aparición de nuevos victimarios de los delitos letales, como fueron los familiares y conocidos de las víctimas y, aun cuando son hechos que vienen ocurriendo desde hace algunos años en la entidad capital, estos eventos llevaron en 2022 a una considerable proporción de casos de violencia intrafamiliar y de pareja. Asimismo, hubo un fuerte incremento de los delitos relacionados con el incremento de robos y robos de letalidad y lesiones, donde también estuvo presente la delincuencia, producto de una mayor circulación de divisas en efectivo y el repunte comercial en le AMC, en un entorno a la vez marcado por amplias desigualdades sociales y económicas.

Tasas de mortalidad en el Área Metropolitana de Caracas

Al hablar del Área Metropolitana de Caracas (AMC), los municipios Libertador y Sucre registraron cada uno una tasa estimada de 67 MV por cada 100 mil habitantes. Por su parte, los municipios Chacao, El Hatillo y Baruta alcanzaron unas tasas de 41, 29 y 26 MV por cada 100 mil habitantes respectivamente. Debe acotarse que estas tasas solo incluyen los componentes de homicidios, resistencia a la autoridad y muertes por averiguación, sin desapariciones.

En este sentido, y tomando en cuenta que el AMC registró una tasa de 61 MV por cada 100 mil habitantes, las estimaciones para los cinco municipios de la llamada “Gran Caracas” confirman la tendencia tradicional de la violencia en la ciudad, con Libertador y Sucre posicionándose como los más violentos, y Chacao, Baruta y El Hatillo en lugares secundarios y con números más bajos.

La diferencia histórica entre estos municipios ha estado en que Libertador y Sucre son territorios mucho más poblados y densos, con zonas populares azotados por la violencia letal de delincuentes; mientras que en Chacao, Baruta y El Hatillo predominan delitos como el robo y el secuestro, y son zonas menos pobladas del AMC.

En relación a las parroquias, se observó que de las 32 que conforman el AMC, resaltaron Altagracia, San José, Coche, San Bernardino y El Paraíso en el municipio Libertador, con tasas de MV por cada 100 mil habitantes de 264, 179, 156, 154, 112 respectivamente; y Filas de Mariche en el municipio Sucre, con 107 MV por cada 100 mil habitantes. Estas seis parroquias fueron las únicas en superar los 100 fallecidos por cada cien mil habitantes, y explican en buena medida la preeminencia de Libertador y Sucre como los municipios más violentos de la ciudad.