El Nuevo Herald
Por Verónica Egui Brito

21 de febrero de 2023

El corto “La crisis de la ilusión” aborda una realidad cada vez más común en Venezuela, el aumento del suicidio. La pandemia exacerbó el problema.

El suicidio expone el profundo dolor emocional de una persona que prefirió autoinfligirse daño, diezmando su propia vida, como solución para dejar de sufrir. En Latinoamérica es un tema que poco se aborda por considerarse tabú. Genera vergüenza y estigma hablar de la depresión, de sus causas y, sobre todo, de cómo contrarrestarla.

Ya no más. Camille Rodríguez Montilla, periodista venezolana de 26 años, expone las consecuencias de no atender a tiempo la enfermedad mental en Venezuela en su nuevo documental “La crisis de la ilusión” que se estrena en las plataformas digitales de el Nuevo Herald y Miami Herald.

El documental es autobiográfico. “A los nueves meses de la pandemia (septiembre de 2020) fui diagnosticada con depresión clínica”, explicó la joven realizadora a el Nuevo Herald. “En Venezuela el tema del tratamiento psiquiátrico y la medicación siguen siendo un tabú enorme. En ese momento yo tenía nueve meses sin trabajar y gastaba el dinero que tenía ahorrado en psicólogo, psiquiatra y la medicación, que no es económica. Fue un esfuerzo duro poder pagarlo, pero no es el común denominador”.

Rodríguez Montilla planteó inicialmente hacer su primer documental sobre la depresión y la falta de recursos para tratar las enfermedades mentales en Venezuela, tomando en cuenta no solo el agravante de la pandemia, sino también la situación económica y social del país.

Sin embargo, mientras se adentraba en el tema, el foco fue concentrándose en una de las consecuencias de la enfermedad mental no atendida: el suicidio en Venezuela.

En 11 minutos y 46 segundos, Rodríguez Montilla ejemplificó, a través de desgarradores testimonios de familiares de personas que se suicidaron y personas con diagnóstico de depresión, el problema de salud pública en el que se ha convertido este tipo de muerte en Venezuela.

Rodríguez Montilla concentró sus esfuerzos en dos localidades del país: Mérida y Nueva Esparta. Desde 2001 la primera, en la región andina, se mantiene con la mayor tasa de suicidios en el país, mientras que la segunda, de donde es originaria la periodista, se ubica en los últimos lugares.

La periodista buscó contrastar dos realidades en el mismo territorio nacional a fin de evidenciar cómo la cultura de una comunidad, factores climáticos, hereditarios, sociales e incluso la actividad económica de la región pueden influir en la depresión y en el acto del suicidio.

“La crisis de la ilusión” es un corto documental, financiado por una subvención de la National Geographic Society, que demoró más de seis meses en investigación y conceptualización, un par de semanas en rodaje y posteriormente el proceso de edición.

Para realizar el documental contó con el apoyo logístico del Observatorio Venezolano de la Violencia (OVV), organización sin fines de lucro que maneja estadísticas actualizadas de mortalidad en el país.

Tasa de suicidios en aumento en Venezuela ante el silencio oficial

A pesar de que este país suramericano tiene tasas relativamente bajas de suicidio —8.5 suicidios por cada 100,000 habitantes—, cada año las cifras aumentan. Guyana, por ejemplo, limítrofe con Venezuela tiene tasas que la triplican, explica el OVV.

El último anuario de mortalidad, que es la principal fuente para estudiar el suicidio, data de 2021, aunque se basa en estadísticas de 2016. Mientras que el último anuario de estadísticas de Venezuela fue impreso en 2003, explicó Gustavo Paéz, coordinador regional de Observatorio Venezolano de Violencia Mérida.

“El subregistro sobre el suicidio en Venezuela es enorme porque ellos (OVV) solo saben de casos que reporta la prensa o que le hacen llegar informantes que tienen en cada estado”, indicó Rodríguez Montilla.

Para 2021, la cifra de suicidios en Venezuela ascendía a 340 casos, una cifra superior al año anterior que reportó 306 casos, según reportó OVV.

“En el país no existen estimaciones y proyecciones de población actualizadas (…) en ese sentido las tasas estimadas de investigación deben tomarse como resultados conservadores y aproximados de la realidad, es muy probable que sean más elevadas puesto que mientras el numerador, muertes pos suicidio, ha aumentado, el denominador con el que se estima ha disminuido, es decir, la población”, indicó OVV en un informe de noviembre de 2022.

Aunque en Venezuela no existían estudios cualitativos y cuantitativos para responder por qué el estado Mérida es la entidad con más casos de suicidio en los últimos 21 años, como muestra el documental, en OVV tienen algunas conjeturas.

“Esta entidad está ubicada en parte de la región andina del país, donde predomina la personalidad del merideño nato, con una cultura machista, hombres que trabajan la agricultura, que son introvertidos, no hablan de sus emociones negativas, que tienen un consumo excesivo del alcohol”, indicó Paéz. “Además son comunidades que practican la endogamia y pueden tener factores hereditarios, sumado a la depresión”, dijo.

Para el experto, un factor adicional es la ausencia o poca presencia de personal capacitado para tratar las enfermedades mentales, medicamentos que escasean o son muy costosos.

“Es difícil responder cuál ha sido el impacto del COVID sobre las estadísticas de suicidio en el país, pero sabemos que los agricultores de Mérida y otros estados, perdían sus cosechas, no podían venderla por falta de gasolina y el cerco epidemiológico”, dijo Páez. “Pero, peor que la pandemia es la emergencia humanitaria compleja que vive el país. Somos vulnerables, estamos en crisis, factor adicional a los riesgos en los suicidios y luego aparece el COVID”.

Diversas organizaciones sin fines de lucro han caracterizado que Venezuela vive una emergencia humanitaria compleja desde hace varios años, que no es más que la suma de tres elementos característicos: una crisis alimentaria, repunte de enfermedades emergentes y reemergentes y un desplazamiento forzado de la población. Factores que influyen en las emociones de sus habitantes.

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